TREN INTEROCEÁNICO, INCONCLUSO.
Por: Carlos CASTELLANOS ALCÁZAR
Hubo júbilo y esperanzas por la inauguración del tren interoceánico- que unirá al océano Pacífico con el Atlántico, sueño, de los oaxaqueños y especialmente para el Istmo de Tehuantepec, sin embargo, se espera, que no caiga el desaliento- en cuanto- esta obra se declare inoperante porque- no está concluida a satisfacción, ni al cien por ciento- y por supuesto- le hacen falta muchas instalaciones, equipos, servicios y técnicas para mayor seguridad de los pasajeros.
El tren- inaugurado el 22 de diciembre por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en territorio oaxaqueño- cierto- que es una esperanza- que implementará el desarrollo comercial, la productividad e industrial- toda vez, que comunicara a Oaxaca con Veracruz, del Puerto de Salina Cruz al Puerto de Coatzacoalcos- puede ser un sueño cumplido, solo que se hizo a la carrera con fines políticos electorales- y forma parte de las obras insignias del gobierno de la Cuarta Transformación, la 4T.
No podemos cantar victoria por la puesta en marcha de este ferrocarril de pasajeros y de carga, pero- queda en el beneficio de la duda de ser una obra “pantalla “-como, las demás, que se propuso realizar el presidente en turno- y que por cuestiones políticas electorales están siendo inauguradas con premura para vender la idea de que es una realidad la Cuarta Transformación, la 4T, pero en el fondo hay una serie de presunta corrupción que se oculta a la sociedad.
Obras como el aeropuerto Internacional de Santa Lucía- “Felipe Ángeles” (AIFA)- inaugurado en marzo del año 2022- no concluida e inoperante hasta hoy por la falta de vías de acceso y salida de pasajeros y carga de los vuelos diarios, muy difícil- que se regularice a menos de un año de concluir el sexenio del actual gobierno- y que decir de la refinería de Dos Bocas en el Estado de Tabasco, también- inaugurada en julio del 2022- inoperante e improductiva hasta hoy.
El Tren Maya- no se queda atrás- inaugurada; se puso en marcha en su primera etapa cubriendo una tercera parte de su recorrido con fallas a la vista. Ya no es el Tren Maya, sino el “Tren Falla”, obras, hechas con el mismo espíritu populista con costos muy elevados, hasta triplicados en el presupuesto original- además, hay signos de opacidad.
Ahora, los oaxaqueños, tienen la fortuna- y lo que no se espera, que sea el infortunio, pues, de hecho, la obra, no está concluida totalmente- y puede llevarse varios años en regularizarse, eso será cuestión del próximo presidente o presidenta de México, pues le hacen falta muchas instalaciones, equipos y servicios para comodidad y seguridad de los pasajeros, pues también- no deja de ser una obra, que deja mucho que decir, pues estará administrada por la Marina para mayor seguridad, lo predice inseguridad.
Son obras, que han sido muy cuestionadas desde su planeación, sus proyectos, su productividad, rentabilidad, que no tuvieron el consenso de la ciudadanía- y por supuesto- que siguen generando inconformidad, además, que no hay claridad en los presupuestos destinados del erario público.
Más que todo son obras para llamar el voto a MORENA, precisamente inauguradas en la víspera del proceso de elección del nuevo presidente, senadores, diputados, gobernadores y autoridades municipales, hechas a prisa y sin proyectos de factibilidad por lo que ocasionaron muchos problemas sociales, pues, se afectaron los sistemas ecológicos, provocando ecocidio del medio ambiente.
